miércoles, 25 de abril de 2012

Está bien, empezaré a contarlo; esta es la situación: viernes, ocho y cuarto de la tarde, bastante frío (por no decir muchísimo), él, yo y un móvil con música. Bueno, tal vez había algo más cerca de nosotros pero... Pero yo no lo recuerdo. Creo que ese fue el día en que construimos "Nuestro Mundo".Vale, sigamos. Yo, a su izquierda. él, a mi derecha -como casi siempre-
El reproductor en modo aleatorio, y curiosamente, comenzó a sonar "I can wait forever". Una canción acertada para el momento.
¿Sabes lo que significa? - Le pregunté. Siempre me ha gustado enseñarle nuevas cosas, y aprender de él también -Que puedo esperar para siempre.
Me miró, y como mil millones de veces más, sus pupilas acariciaron mi alma.Seguía sonando música, aunque yo ya me había perdido en su perfil. Y entonces, me di cuenta. Lo entendí todo. "No puede ser..." me dije a mi misma; le había asegurado que no me iba a gustar, y ahora estaba pisando mis propias palabras. Me di cuenta que no había canción que no trajese su imagen a mi mente, y me percaté de que ya no había vuelta atrás.Todo eso rompía mis esquemas... Parecía que ya había ganador de ese pulso que había estado reñido esas últimas semanas; parecía que ya había ganador del pulso cabeza y corazón...Nunca nadie había roto mis esquemas, pero tampoco nunca nadie me había sonreído de aquella forma como él  lo hizo aquel día. ¿Le quería? ¡Sí! Y con todas las fuerzas del mundo.
Ya hace prácticamente diez meses de esto, y aun mis ojos se vuelven a emocionar, y mi boca a distorsionarse  en forma de rodaja de sandía, cada vez que recuerdo aquel momento. Y no me importa, de hecho me gusta, casi tanto como me sigue gustando él. Pese a quien le pese..
 http://www.youtube.com/watch?v=Bymr-Xc2Z-M

"Pero es que no me atrevo a decir que la quiero
Nos une una amistad más bonita que el cielo.
Yo creo que mis amigos ni lo entenderían
pero es que ella es tan guapa, ay, tan guapa
prefiero que mi alma dicte la sentencia
antes de que se queme, mi corazón se queme"

Semanas antes de ese día, privados así ya me alegraban las tardes, me empezaban a descolocar y los libros de las estanterias de mi cabeza ya empezaban a caerse, impulsados por esas caricias que me hacen estar hoy aquí. Pero yo tenía las ideas claras, sí, sí, las tenía. En cuanto me descolocaba algo, lo volvía a poner al sitio, pero desde aquel viernes, su olor me arrastran hacia él tan fuerte, que soy incapaz de llegar a la estantería y poner las cosas en su sitio. Pero no me importa, me acostumbré a ese mundo.
Y bueno, el fin de semana ese, no le tuve a mi vista, pero si en mi mente.
Era genial poner corriendo la dirección de correo electrónico y despacio la contraseña, para no fallar y entrar a la primera, sabiendo que encabezando la lista de las novedades iba a estar un privado suyo. 

"Tanto la quería, tanto que yo, por ella moría, eso bien lo sabe dios, ella es la reina de mi inspiración, por la que yo sufro, la musa de mi amor. (8)"

Y así, señoras y señores, resulta imposible no caer. Así que ahí estaba, contando segundos para volver a verle.
http://www.youtube.com/watch?v=Rgx87AMpuPA

¿Qué nos unía?
Sinceramente no lo sé. A día de hoy tampoco sabría definirlo; es en plan asdfghjklñ.
Sencillamente lo llamamos "ese algo especial".
En muy poco tiempo, estaba enseñandome barbaridades de sensaciones que jamás había sentido. Como que con una simple palabra me pudiese dar un pinchazo.

"Hacia mucho que cuando me castigaban al final no paraba de mirar a la chica de alante, hacia mucho de q cuando esa xica me miraba me entrara verguenza y desviaba la mirada con una sonrisa, hacia mucho q cuando me hablaba cerca no me entrara un escalofrio, hacia mucho q no pedia un beso al enfadarme, hacia mucho q las frases de canciones no me recordaran a ella, hacia mucho q no tenia miedo a ver como seria estando con ella, hacia mucho q no tenia miedo a perderla, hacia mucho tiempo q no era un niño inocente q solo quiere a su princesa, eso he sentido hoy y pensado"
 
 Supongo que nos enamoramos de nuestra amistad.

Pero como en cualquier otra historia, no todo podían ser corazones y algodones de azúcar..

"No puedo mas, lo siento. Si el ocupa mi lugar, no quiero hacerte daño... Te necesito y te vas.
Si no estas a mi lado, si dices que me quieres... Dejarlo es mi miedo, no quiero acerte daño.
No puedo mas, lo siento... "

No puedo más, deciamos ahí... Jajajaja, si hubiesemos sabido todo lo que nos quedaba por delante...

Pero volviamos a vernos, y todos los problemas se volvían a esfumar. Nos volviamos a evadir en nuestro querido mundo y que le diesen a todo lo demás. Éramos muy felices.
Yo podía pasar horas mirando su perfil, y él por lo visto, también. Me encantaba que recordase fotos antiguas mías y que me dijese que estaba guapa, de verdad que me encantaba. Me encantaba cada mínimo detalle. Me aceleraba el corazón encender el wifi y ver un whatsapp suyo.

Seguía sin encontrar la vuelta atrás,  y puede que influyese el que ya no la buscase.

Me solía decir que no tenía corazón, esperando que yo le contestase lo que siempre le contestaba: "Bueno, a lo mejor es que me lo han robado". Le encantaba que le recordase por qué le quería, y aunque a mi me costase reconocer las cosas, se lo explicaba, le abría completamente mi corazón.. Bueno, su corazón mejor dicho, ya estaba en su propiedad.

Me solía decir que él nunca perdía, siempre ganaba, incluso a querer más. Pero yo sabía que no.

"Que tengas claro que algun dia ganare yoo y te comeras las palabras monii jajaja ;P"

Aunque espero que aun nos queden muchas guerras más por esto.
Soliamos inventarnos millones de aventuras, y todas siguen en pie.
4 años son los que nos quedaban, ahora 3 años y medio para querernos sin importarnos nada más.
Y llegó otro día que tampoco se me va a poder olvidar jamás.
Viernes -como no-, me esperaba un fin de semana en mi pueblo sin verle y sin internet, oh no.
Pero él siempre tenía las ideas apropiadas y los detalles geniales, para convertir cualquier cosa en otra totalmente distinta. Había y hay, infinidades de cosas que se le dan bien hacer, pero si en algo es experto, es en hacerme recordarle.
Antepenúltima hora de la mañana, pelo perfectamente plantado, sonrisa dulcemente resplandeciente y un papel en la mano. Me lo dio y lo miré. Nunca pensé que se le podría tener tanto cariño a un trozo de papel mal cortado. Pero es que el hecho de que me lo hubiese dado él, ya hacía que no fuese "un trozo de papel" era (y es) mi billete para evadirme de la realidad cada vez que lo necesitase. Eso y un par de auriculares.

"Para cuando escuches música me escuches a mi y cierres los ojos y pienses en todo lo felices que seremos saltando por lo blanco de los pasos de cebra, ir a hoteles sin pagar, hacerlo en probadores para desayunar. 
Para que seamos todo.
No se lo enseñes a nadie!
Te quiero..."


Y así pasaban los días, conversaciones infinitas, eramos felices incluso sin decir nada. O por lo menos yo lo era. Él trajo a mi cosas que no tenía, y a mi solo me importaba no perderlo.
Éramos perfectos confidentes, me sentía agusto contandole las cosas. "Yo conozco los secretos que guardas bajo llave" me dijo. Y me sentía agusto escuchándole, aunque a veces no dijese lo que quería oir, pues habían cosas que me partían el alma. Pero seguía sin importarme; al día siguiente volvía a verle con esa sonrisa como si todo fuese posible, y se me olvidaba de nuevo que habían posibilidades de que los imposibles existiesen.

Intentábamos a veces, que esta situación se esfumase pero todos fueron intentos en vano, ya que lo que llega sin ninguna razón, tampoco tiene razón para irse.
He de reconocer que a veces hacía cosas que me mataban, que me incitaban a abandonar nuestro mundo, pero justo en el momento en que iba a bajar, me miraba, me sonreía y me decía tres o cuatro cosas de esas que solo él sabe decir, y volvía a subir. Y ahí me quedaba, a su lado. Prometiéndole un siempre, que por supuesto pienso cumplir.

Una vez, me enseñó una canción y pienso, que nuestro estado es como si le diésemos a replay todo el rato en esa misma pista:

"Que ya lo sé.. que aqui se termina la más bella historia de toda mi vida, sera por el tiempo sera por esperar a que pasara algo que no iba a pasar..
Que si fue culpa mia fue culpa tuya,que si no se cuida el amor se esfuma,como nos vestimos con la piel de la duda... como nos inventamos mas de una aventura.
No digas nada.. que te extrañe esto ya lo se, junto a las estrellas soñare como volverte a ver aqui, porque no quiero que te vayas...
Que fue de las promesas que nos dimos..
si te vas llevate contigo esta voz,y no digo nada para no despertar a mi orgullo que ha pactado con la soledad..
Esperate y escucha,espera y no te vallas, niña de mi alma.. no te vayas ven abrazame.. y no digas nada y besame,que te amaré eso ya lo se..
Que si te vas no me queda nada.. que si te vas no me queda nada..."


Porque cuando creíamos que ya se había acabado la historia, volvíamos a escribir juntos otro capítulo. Me volvía a coger de la mano, y volvíamos a irnos más allá.

Quizá es todo esto lo que le haga especial, todo esto y muchas cosas más.

Tenía miedo de perderle, yo sabía que le había prometido una eternidad, pero lo que no podía saber era cuándo se iba a cansar él.. Me ponía mal solo pensar que en cualquier momento pudiese aparecer otra persona que le recordase lo especial que era y que ya no me necesitase a mi...

Le encantaba ponerme celosa, era su celosilla, y aunque a mi no me encantase tanto, he de reconocer que daría lo que fuese por que me lo llamase toda la vida.
Y aquí viene otro momento de los claves. Me dijo que "una" le había dado los buenos días, y blá blá blá.. Le dije que no importaba, yo podía darle también los buenos días, y las buenas noches, incluso los buenos amaneceres si hacía falta.. Y así hice. Le di los primeros buenos amaneceres. Nunca le había deseado a nadie los buenos amaneceres, pero por él.. Por él no me importaba ponerme el despertador a las 4:30 de la mañana, y luego tener que volver a levantarme a las 7:25; de verdad que no me importaba.

Detalles que marcaban la diferencia... Solíamos enfadarnos por tonterías, y pienso que lo hacíamos solo para volver a reconciliarnos:

"Llevo cuarenta y cinco minutos intentando buscar un texto, un texto que enviarte, que te pueda hacer sonreir, que te pueda hacer pensar que te quiero un puntito más que hace tres segundos, que pueda hacer que no tengas en cuenta si he hecho algo malo, y que te pueda hacer pensar en mi, tan solo un cuarto de lo que yo lo hago en ti mientras lo busco.
Pero no lo he encontrado, no he encontrado ese texto con el que sentirnos identificados. No, nunca encuentro ese texto que nos defina. Siempre alguna canción me recuerda a ti, me hace imaginarnos, pero nunca llega a dar en el blanco. Y me encanta. Me encanta que no se pueda definir, que ni nosotros sepamos hacerlo. Pero me encanta que haga que sonriamos, y que nos miremos, y que aunque a veces, nos podamos enfadar, algo haga que volvamos a juntarnos, un imán, un imán de los guays. Así que se ponga en marcha que no quiero no tenerte..
Te quiero, querida pieza vertical del tetris."


Y cualquier momento siempre ha sido bueno para recordar lo que hiciese falta:

-Si bueno, y yo quiero volar.
+Yo también quiero..
-¿Y qué más quieres?
+Que estés por siempre en mi..





Y cualquier momento era bueno para sacar una sonrisa:


+Oye.. Tú nunca me llamas cosas con amor. Yo siempre te digo cariño o cosas así, y tú no.. 
-Bueno, ya sabes que a veces no me sale.. Bueno, vamos a hacer una cosa, la próxima vez que escuches mi voz tienes que decir: ¿Qué haces?
+Hmm vale, más o menos.
(...Suena el teléfono...)
-¡Hola!
+Sí, ¿Dime?
-Oyeeeee, ya lo has olvidado, ¿Qué tenías que decir?
+Ah, sí, perdón.. ¿Qué haces? 
-Te estoy llamando con amor.. 
+Te quiero,te quiero mucho. 

Y después de mil historias más, de mil supuestos adioses en vano,  a día de hoy sigo siendo incapaz de no sonreír al verle, él sigue siendo capaz de producirme pinchazos, pinchazos de esos que deben significar esa tontería que por lo visto le da a mucha gente, el amor..
Gracias por enseñarme qué es el amor, gracias por enseñarme a decir te amo, a decirlo de verdad..

He aprendido que es no se puede olvidar a una persona que te hace olvidar todo lo demás.

Te amo mi cosi, mi ranita... como a nadie.

Y bueno, todo esto sería solo el principio de todo lo que podríamos haber sido o que podríamos ser tú y yo, pero las cosas no siempre van como queremos. Quizá algún día conozcamos a nuestro amigo el arrepentimiento, quizá ese día sea hoy, mañana o dentro de 3 meses, y lo más seguro que ya sea demasiado tarde.

Solo quiero que sepas una cosa más, y es que NUNCA NADIE te va a querer como lo he hecho yo.

4 años más tarde...

Si el día que escribí este blog me hubiesen dicho que estaríamos retomando nuestra historia no me lo hubiese creído, pero la vida te da sorpresas, sorpresas tan mágicas como esto.

Nos hemos vuelto a encontrar cuando nos ha tocado, y es increíble. Fue tan precioso lo que vivimos que quizá ahora tenemos un reto enorme y es mantenerlo a la altura, pero sé que tú y yo lo vamos a conseguir. Y lo sé cuando me miras, y cuando me besas, y cuando te ríes. Y lo sé porque al escribir esto se me vuelven a llenar los ojos de lágrimas como se me llenaron en su día al recopilar todas nuestras cositas.

Ahora han cambiado muchas cosas, ahora todo es más fácil, es realmente nuestro momento, nos lo merecemos y tenemos que disfrutarlo, y que mejor manera que siendo felices juntos.

Realmente todo eso sí que era tan solo el principio de lo que podríamos haber sido tú y yo, porque ahora viene lo mejor. Ahora ya no tienes que mirarme desde final de la clase, sino que me puedes mirar desde el otro lado del sofamagic o del sofácama de nuestro nidito de amor. Ahora ya no tengo que desear cruzarme contigo por los pasillos para darte una notita de amor, sino que te puedo dar una carta en la puerta de mi casa cuando, contra nuestra voluntad, nos toca despedirnos tras montones de horas juntos. Ahora no tengo que desear con todas mis fuerzas que llegases a clase con ganas de darme la mano por debajo de la mesa, sino que tú mismo me haces sentir enorme con tan solo poner tu mano en mi pierna mientras vamos en el coche aunque te cueste más cambiar de marcha. Ahora no me hace falta pedir a cada pestaña un beso de tu boca, ya que ahora no es que los desee, sino que los necesito; me das los besos como nadie más me los había dado antes y no quisiera estar ni un solo día sin ellos, pero como está difícil, mejor te digo que no quiero otros besos que no sean de tus labios.

Lo cierto es que es poquito el tiempo que llevamos retomando nuestra historia, reconstruyendo nuestro mundo, volviéndonos a conocer, y que nos quedan por vivir un montón de cosas, porque quiero vivirlas a tu lado y al de nadie más. Siempre he estado en contra de los "para toda la vida", o de los "te necesito" o los "solo tú me haces feliz", pero como siempre, para algo estás tú, para desmontar mis esquemas y hacer que me muera de ganas de gritarle al mundo que te quiero, que te quiero a rabiar como siempre te he querido, y que quiero quererte para siempre. Porque me encantas. Porque sí. Porque eres tú. Porque tienes algo especial que se metió dentro de mi hace tiempo y que ahora he aprendido que no ha salido todavía. Y que no quiero que salga. Que quiero que te quedes a mi lado haciéndome sonreír, que me se me siga poniendo cara de tonta cuando pienso en ti, que no pueda ocultar el brillo de mis ojos cuando pronuncio tu nombre, que siga muriéndome de ganas de verte cada semana. Quiero estar a tu lado en tus días buenos y en los no tan buenos, porque no todo en esta vida es bonito (aunque juraría que sí mientras me tienes entre tus brazos) pero si tú quieres podremos con todo lo que se nos ponga por delante. Me he comprometido sin darme cuenta a luchar por lo nuestro desde el momento en que cogiste mi mano después de tanto tiempo y no sabes como me alegro, así que tengo que darte las gracias por devolverme las ganas de luchar por alguna cosa, de ilusionarme con el miedo que eso me da, por volverme a querer como solo tú lo haces, por hacer desaparecer el mundo por momentos con tus besos, por escuchar mis historias de pesada, por compartir conmigo tu día a día, por darme la mano cuando lo necesito, por mimarme, por confiar en mi, por querer intentarlo, por hacerme aprender lo que es el amor, y porque me encante aprenderlo.

No sé cómo lo haces, no sé cómo consigues ser tan especial y tan diferente, pero por favor, no dejes de hacerlo, porque eres la magia de mi vida.

Nos queda muchísimo por vivir y por reír, estoy segura, y espero que tú también lo estés.

Y ahora solo quiero que sepas una cosa más, otra vez, y es que NUNCA NADIE te va a querer como lo he hecho yo, mejor dicho, como lo hago yo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario